por Carlos González de Escalada Álvarez
Los reservistas voluntarios españoles no pueden compararse con los de otros países en algo muy importante: ser activados para misiones en el extranjero. Esta carencia hace que nuestra reserva militar sea apenas homologable con las de nuestro entorno.
Estoy plenamente a favor del empleo de reservistas voluntarios en misiones internacionales. Con más de seis años de rodaje del modelo, ya existe un cuerpo suficientemente variado y numeroso de ellos, cuyas vicisitudes personales y profesionales les permitirán servir en el extranjero por periodos más o menos largos. Personalmente, opino que nuestros reservistas no alcanzarán su plena consolidación dentro de las Fuerzas Armadas hasta que este hecho se produzca regularmente y con toda naturalidad. El uso de reservistas en misiones es completamente habitual en todos los países de nuestro entorno.
España debe apostar por este sistema por las razones que paso a exponer:
Necesitamos homologarnos: La reserva voluntaria española, como elemento activo, que no durmiente, de las Fuerzas Armadas no se podrá nunca comparar con las del resto de los países europeos hasta tener su "bautismo de fuego" en el exterior. Nunca mejor dicho. Baste teclear la palabra en inglés "reservists" en un motor de búsqueda, para ver la cantidad de noticias de reservistas que sirven fuera de sus fronteras. España necesita que su reserva militar sea homologable a las de los países más modernos, no un sistema más virtual que real que se usa poco o no se usa nada.
Nuestros reservistas son de primera: Los reservistas voluntarios no son militares de segunda clase, son militares a tiempo parcial con competencias y habilidades diferentes y complementarias. En muchos casos, con especialidades de escasa o nula penetración en las Fuerzas Armadas. Si un militar en activo, especialista en un sistema de armas específico, puede ir a Afganistán; no es lógico que no pueda hacerlo un reservista que se haya podido formar codo con codo, en la fase preparatoria previa.
Son necesarios: Hoy en día no se va a misiones al extranjero a combatir, se va a pacificar y reconstruir y sólo si no te dejan, entonces tienes que defenderte. La creciente complejidad de las misiones y el mayor contacto con la población civil, hace que sean necesarias muchísimas especialidades, abundantes en la vida civil: médicos, farmacéuticos, veterinarios, ingenieros, periodistas, comunicadores, psicólogos, pedagogos, arquitectos, expertos en administración pública, financieros, técnicos de obras públicas, técnicos de sistemas, informáticos, linguistas, peritos, electricistas. Díganme cuáles de las profesiones que acabo de citar no son útiles en un Equipo de Reconstrucción Provincial en Afganistán. Vamos, estamos hablando de un cofre del tesoro, que nadie se atreve a abrir.
Es legalmente posible: Es perfectamente legal y posible movilizar a reservistas para servir en el extranjero. Con la formación necesaria, se pueden cubrir los puestos especialistas antes mencionados. ¿Es peligroso? Toma claro, que sí, pero es peligroso para todos, no sólo para los reservistas. Señores, los reservistas tienen el mismo derecho a arriesgarse voluntariamente y a morir por su Patria en defensa de nuestros intereses. Como cualquier otro militar, el reservista está dispuesto ha hacer el supremo sacrificio, llegado el caso. Igual que lo haría un guardia civil, un policía o un bombero. El miedo a perder un reservista no puede justificar que no se les utilice.
Los reservistas así lo quieren: Al adquirir la condición, los reservistas ya declaran si están dispuestos a servir en el extranjero o prefieren hacerlo dentro de nuestras fronteras. Me atrevo a decir que son inmensa mayoría los que han dicho "sí, estoy listo" a los que han declarado que no. Y nadie hace las cosas mejor que aquel que desea fervientemente hacerlas.
No cuesta más: Activar reservistas no es más caro que activar a un militar del componente activo. Si acaso es más económico porque los reservistas carecen de complementos. No soy experto en finanzas públicas, pero asumo que se podrían habilitar partidas para poder activar reservistas sin demasiados problemas.
Las rotaciones son más cortas: Hoy en día las rotaciones internacionales tienden a hacerse más cortas, para hacerlas más llevaderas. Precisamente, las activaciones excesivamente largas, perjudican a la carrera profesional civil del reservista (las excedencias legales son de seis meses). Pero si los reservistas tienen la opción de activarse para una misión cuatro o cinco meses, habrá muchos que sí puedan hacerlo.
Necesitan sentirse iguales: Un reservista que haya estado en Afganistán y el Líbano, será considerado de otra forma por sus compañeros en activo. Los reservistas necesitan cumplir esa suerte de "mayoría de edad" que supone poder cumplir las mismas misiones que los demás y necesitan, como el comer, la consideración, veteranía y dignidad que confiere el haber participado en misiones internacionales.
Fuente: Observatorio de la Reserva
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